lunes, febrero 09, 2009

FEBRERO, EL MES DEL SOL.

Seguimos en pleno año Internacional de la Astronomía. Este mes está dedicado a la estrella más importante para los que habitamos la Tierra, el Sol. Todo o casi todo aquí en la Tierra funciona gracias a la energía solar. Por ejemplo, nosotros nos alimentamos de plantas y de otros animales, es decir, obtenemos la energía para seguir vivos de ellos ¿de dónde la obtienen ellos? Las plantas del Sol, y los animales o bien de otros animales o de plantas. Vamos, que de una forma u otra todos funcionamos por energía solar, y no sólo eso sino que nuestra actual civilización depende y mucho de la energía solar. La principal fuente de energía que usamos son los conocidos combustibles fósiles que como su propio nombre indica provienen de fósiles, es decir, de animales y plantas que vivieron en el pasado remoto, ¿y de dónde la obtuvieron ellos? Supongo que ya lo saben, directa o indirectamente dicha energía provenía del Sol. Los combustibles fósiles no son otra cosa que energía solar almacenada de forma química.

La importancia del astro rey no acaba ahí. A través de la observación del Sol la humanidad fue capaz de determinar cuándo empiezan las distintas estaciones, lo cual permitió el desarrollo de la agricultura, que no es precisamente una cuestión menor. No es de extrañar que las civilizaciones antiguas veneraran al Sol como si de un Dios se tratara.

El Sol, la estrella que nos hace estar vivos, que influye en el clima de la Tierra, gracias a la cual desarrollamos la agricultura, y con cuya energía en cierto modo movemos el mundo, no está de más dedicarle un mes y aprender más sobre ella ¿no?

Ismael Pérez Fernández.