Recientemente hemos asistido al intento de aprobar la denominada ley Sinde. Siempre me ha dado la impresión que lo que realmente preocupa a los gobernantes y a los que pueden llegar a gobernar es la libertad que hay en Internet. En la red cualquiera puede abrir un blog y escribir lo que piensa ya sea un tratado magnífico sobre filosofía o la mayor tontería supina, ¿demasiada libertad para los gobernantes? Espero que no, pero la aparición de Wikileaks y todo lo que ha conllevado parece indicar que así es.En España el intento de crear una herramienta...