En el número del mes pasado de la revista Journal of Vertebrate Paleontology, se ha publicado el “hallazgo” de un fósil bautizado como Megapiranha paranensis, el cual es un fósil transaccional que parece estar a mitad de camino entre la piraña y el pacú. El fósil fue desenterrado a principios del siglo XX, pero ha sido hallado recientemente en un cajón del museo de Argentina.
El “pariente” más cercano de la piraña es el pacú (Myleus pacu) que es un pez que se alimenta mayoritariamente de semillas y algas. Como cabria esperar, al tener una dieta diferente a la de la piraña encontramos diferencias entre sus dientes. Los dientes del pacú no son tan puntiagudos como los de la piraña y además tiene dos filas de ellos, mientras que los de la piraña que están alineados en una sola fila. Pero si ambos peces están emparentados cabría esperar encontrar un fósil donde se pudiera ver un paso intermedio entre ambos sistemas de dentaduras, y precisamente es lo que muestra el fósil Megapiranha paranensis. Megapiranha presenta los dientes en zigzag, como cabría esperar de un ancestro de la piraña donde sus dientes están cambiando de la formación en dos filas a una sola. Además, el filo de los dientes del Megapiranha paranensis está serrado como en las pirañas, pero al mismo tiempo los huesos donde se unen con la mandíbula superior tienen similitudes con los del pacú.
Un descubrimiento que nos permite conocer más y mejor la historia evolutiva de la piraña, pero no sólo eso, descubrimientos como éste vuelven a poner de manifiesto que la evolución es un hecho y, que la teoría de la sintética de la evolución goza de buena salud.
Ismael Pérez Fernández.
El “pariente” más cercano de la piraña es el pacú (Myleus pacu) que es un pez que se alimenta mayoritariamente de semillas y algas. Como cabria esperar, al tener una dieta diferente a la de la piraña encontramos diferencias entre sus dientes. Los dientes del pacú no son tan puntiagudos como los de la piraña y además tiene dos filas de ellos, mientras que los de la piraña que están alineados en una sola fila. Pero si ambos peces están emparentados cabría esperar encontrar un fósil donde se pudiera ver un paso intermedio entre ambos sistemas de dentaduras, y precisamente es lo que muestra el fósil Megapiranha paranensis. Megapiranha presenta los dientes en zigzag, como cabría esperar de un ancestro de la piraña donde sus dientes están cambiando de la formación en dos filas a una sola. Además, el filo de los dientes del Megapiranha paranensis está serrado como en las pirañas, pero al mismo tiempo los huesos donde se unen con la mandíbula superior tienen similitudes con los del pacú.
Un descubrimiento que nos permite conocer más y mejor la historia evolutiva de la piraña, pero no sólo eso, descubrimientos como éste vuelven a poner de manifiesto que la evolución es un hecho y, que la teoría de la sintética de la evolución goza de buena salud.
Ismael Pérez Fernández.
Esto es hacer spam, por hacer spam. directamente no te has leído la entrada en la que se habla de un fósil transacional, sólo así se explica que afirmes que no se ahn encontrado fósiles de ese tipo.
ResponderEliminarNo tengo tiempo para entretenerme mucho, pero puedo poner dos ejemplos más de fósiles transacionales:
-Tiktaalik roseae
-Archaeopteryx lithographica
No hay mayor ciego que el que no quiere ver.