
Este pasado viernes fui a ver Transformers. The revenge of the fallen. Sino les gusto la primera no vayan a ver la segunda y, si les gusto la primera, francamente, no sé si es buena idea que vayan a ver la segunda. El caso es que en la película la acción acaba llevando a los protagonistas a Egipto, en concreto a la explanada de Giza donde se hayan las pirámides. Se vuelve hacer referencia, como no, a la idea de que las pirámides las hicieron los extratrerrestres, pero no es en esta falsa creencia en la que me quiero centrar, sino en la creencia de que las pirámides de Keops, Kefren y Micerinos representan el cinturón de la constelación de Orión, algo a lo que recurre el protagonista de la serie (tranquilos no voy a decir para qué ni por qué). Esta idea se la debemos al ingeniero Robert Bauval y al periodista de lo esotérico Graham Hancock. En principio parece plausible, el cinturón de Orión esta formado por tres estrellas y tenemos tres pirámides, además se sabe que la constelación de Orión en el antiguo Egipto representaba a Osiris divinidad cuya personificación era el faraón. Pero que algo suene plausible no implica que sea cierto. Tomemos una vista aérea de las pirámides de Giza (la flecha blanca indica la dirección del Norte):

Si realizamos la proyección de las pirámides al cielo obtenemos que las estrellas del cinturón de Orión deberían tener la siguiente disposición en el cielo:

Si ahora buscamos cualquier fotografía de la constelación de Orión podemos comprobar que las estrellas del cinturón (las tres estrellas azules en el centro de la imagen) no tiene esa disposición:

Además hay otro problema. Aunque la proyección coincidiese, cómo explicar que no coincida la pirámide más grande con la estrella más brillante del cinturón de Orión. En efecto, de las tres estrellas que forman el cinturón de Orión, a saber, Almitak, Alnilam y Mintaka la más brillante de las tres es Alnilam que es la que se encuentra justo en el centro del cinturón, mientras que la pirámide más grande del complejo de Giza es la pirámide de Keops que es la situada más al norte de las tres. Las pirámides de Giza no representan el cinturón de Orión, si los antiguos egipcios querían representarlo ¿por qué iban hacerlo mal? Conociendo la exactitud y meticulosidad con las que se realizaron las pirámides, no tiene sentido suponer que fueran a cometer un error tan grande como éste. La hipótesis de la representación del cinturón de Orión por el conjunto de las pirámides de Giza es una hipótesis errónea convertida en creencia popular.
Ismael Pérez Fernández.
Bibliografía:
- RODRIGUEZ HIDALGO, Ines, DÍAZ VILELA, Luis, ÁLVAREZ GONZALEZ, Carlos, RIOL CIMAS, José. Ciencia y Pseudociencias: realidades y mitos. Madrid: Equipo Sirius, 2004.
- WILKINSON, Richard H. Los Templos del Antiguo Egipto. Barcelona: Ediciones Destino, 2000.
- L. FEDER, Kenneth. Frauds, Myths and Mysteries. Science and Pseudoscience in Archeology. New York, McGraw Hill, 2008.
- RODRIGUEZ HIDALGO, Ines, DÍAZ VILELA, Luis, ÁLVAREZ GONZALEZ, Carlos, RIOL CIMAS, José. Ciencia y Pseudociencias: realidades y mitos. Madrid: Equipo Sirius, 2004.
- WILKINSON, Richard H. Los Templos del Antiguo Egipto. Barcelona: Ediciones Destino, 2000.
- L. FEDER, Kenneth. Frauds, Myths and Mysteries. Science and Pseudoscience in Archeology. New York, McGraw Hill, 2008.













o hacer un viaje por las antiguas civilizaciones del mundo. Para ver el museo en condiciones se puede necesitar fácilmente un mes, y como nosotros no disponíamos de tanto tiempo optamos por hacer unos de los recorridos que se recomiendan en la web del propio Museo. Entre las “joyas” recomendadas para ver, está, como no, la piedra Rosetta, ya saben, la piedra gracias a la cual se pudieron descifrar los jeroglíficos egipcios. Si van por Londres, no dejen de visitar el museo Británico. Si van justos de tiempo pueden hacer
lo ya vale al pena acercarse. De toda la oferta del museo hicimos más hincapié en la zona de los dinosaurios. Lo cierto es que se te ponen un poco los pelos de punta cuando ves con tus propios ojos el tamaño de alguno de los mismos. Según entras en el museo, en el hall principal, te encuentras con un diplodocus, bueno, con su esqueleto más bien, dinosaurio que media de largo unos 26 metros, si no recuerdo mal. El hall principal está presidido como no podía ser de otra manera por una estatua de Charles Darwin. Además de ver la sala de los dinosaurios nos pasamos a ver al que probablemente sea el fósil más famoso del mundo desde hace unas semanas, Ida. Fósil importante, aunque tal vez se ha exagerado un poco.Cuando encuentre un ratillo libre hablaré sobre el mismo.

Si existe un depredador famoso, si nos preguntaran que animal es uno de los mejores depredadores, probablemente muchos contestáramos “el gran tiburón blanco”. Y estaríamos en lo cierto, más incluso de lo que nos podíamos imaginar.

F=frecuencia
Herschel es un telescopio construido para poder captar la luz infrarroja, como nosotros no podemos verla lo que se hace es convertir las distintas longitudes de onda del infrarrojo a longitudes de onda que nuestros ojos si puedan captar. En este caso los colores rojo, verde y azul de las imágenes se corresponden con las longitudes de onda de 160 micrómetros, 100 micrómetros y 70 micrómetros del infrarrojo respectivamente.
Hoy día 16 de Junio se pone en marcha 
Las cinco de la mañana, ufff que sueño. ¿Qué hago escribiendo a estas horas de la mañana? No les ha pasado nunca que tiene que coger un avión de madrugada y quieren dormir todo lo que puedan, pero no se sabe muy bien por qué, te acabas despertando antes de lo previsto. Bueno pues eso es lo que me ha pasado. Dentro de algo menos de 3 horas salgo hacia la capital del Imperio Británico, así que no me puedo entretener mucho. No creo que tenga ocasión de escribir desde Londres. No obstante a la vuelta les contaré, suponiendo que haya algo que contar claro está.
Donde Ec es la energía cinética, m la masa del cuerpo y v la velocidad a la que se mueve el cuerpo.
Donde G es la constante de la gravitación universal, M la masa del cuerpo celeste y R su radio.
Y este es el valor de la velocidad de escape. Si introducimos el valor de la masa de la Tierra y su radio, obtenemos la velocidad que hay que imprimir a un objeto en la superficie de la Tierra para que éste abandone el planeta, y dicho valor es 11,2 Km/s. Sigamos dándole vueltas a esto de la velocidad de escape. Por ejemplo ¿existen cuerpos celestes cuya combinación de masa y radio de como resultado una velocidad de escape superiora la velocidad de la luz? Pues sí, existen y reciben el nombre de agujeros negros. Desde que Einstein desarrollo su famosa teoría de la relatividad sabemos que es imposible que un cuerpo supere dicha velocidad, por lo tanto, si estuviéramos en la superficie de un agujero negro no podríamos enviar nada fuera de él ya que la velocidad de la luz es inalcanzable. De hecho, aunque encendiéramos una linterna la luz no podría escapar de la atracción gravitatoria del agujero negro por lo el rayo de luz se curvaría hacia la superficie del agujero. Ahora resulta fácil comprender el por qué del nombre, “agujero” por que cualquier cosa que entre dentro de su radio de acción jamás volverá a salir y “negro” porque la luz no puede salir de él por lo que nos resulta imposible verlo.
Wendy Freedman, Robert Kennicutt y Jeremy Mould. Un fuerte aplauso para ellos por favor. Según aparece publicado en 


