Como un reloj ha ido el despegue desde Kourou de las misiones Planck y Herschel. Después del despegue, la siguiente etapa delicada era cuando las sondas Herschel y Planck se separarían de la última fase del cohete Ariane 5, para poner rumbo hacia el punto L2, desde donde realizarán sus observaciones. Después del desacople, las sondas enviaron una señal a la Tierra para confirmar que todo iba bien, en ese momento se ha producido un fuerte aplauso en el centro de control. Ahora a las sondas les espera un viaje de 1500000 kilómetros hasta su destino. Una vez en él, cuando empiecen a realizar sus observaciones, comenzará otro viaje, pero esta vez para nosotros, un viaje que nos pondrá tras la pista del origen del Universo y de su historia y, que a buen seguro, nos hará pensar en el infinito y más allá.Image Credit:ESA
Ismael Pérez Fernández.
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