martes, mayo 10, 2005

¿ADIOS A LA FILOSOFÍA?


El anteproyecto de Ley Orgánica de la Educación (LOE), presentado por la ministra de Educación y Ciencia, entre otros cambios, reduce la presencia de la filosofía en el bachillerato sustancialmente, en concreto:

-Desaparece la Ética de 4º de la ESO.
-La Filosofía en 1º de Bachillerato queda reducida a sólo una modalidad de tres (la de ciencias).
-De la Historia de la Filosofía ni se ocupa el anteproyecto.

Esto es francamente sorprendente y preocupante, sino enseñamos a filosofar a las futuras generaciones, los diálogos de besugos serán la norma en el futuro. Y es que el aprender a filosofar consiste entre otras cosas; en defender las posturas propias con argumentos racionales bien construidos sin caer en falacias lógicas. Y también consiste en ser capaz de escuchar y entender lo que dice nuestro interlocutor, ya sea para llegar a la conclusión de que estamos equivocados o ser capaces de encontrar el error en la argumentación ajena. Claro que esto hoy en día no se estila mucho, ya que parece que tiene razón el que más grita.
Otra parte importante del filosofar es el conocerse a si mismo a través de la reflexión y la autocrítica. Éste es el mejor modo de buscar la felicidad. Sólo si somos capaces de ver nuestros errores y deficiencias podremos cambiarlos y mejorar como personas. Aunque esta practica me parece que es prácticamente inexistente (al menos esa es la sensación que yo tengo). Y es que el ser crítico con uno mismo no es fácil, requiere esfuerzo. ¿Pero para que esforzarnos cuando tenemos programas de televisión que nos lo ponen más fácil? Me refiero a programas como Gran Hermano y similares. Estos programas, pienso que triunfan porque permite realzar las deficiencias y limitaciones de los concursantes, haciendo así que el espectador se sienta mejor, no porque el haya mejorado como persona sino porque al ver las miserias de otros amplificadas por los medios de comunicación, le hace pensar que el es mejor persona. Cuando lo cierto es que por muy malo que sea alguien, eso, no nos hace mejores a nosotros. Ya sabemos la tendencia que tenemos todos a ver la paja en el ojo ajeno y pensar que el nuestro esta impoluto.
Aprender a filosofar es vital para desarrollarnos como personas libres, pues así seremos capaces de ser críticos con nosotros mismos y llegar a través del debate a saber que opiniones son objetivamente más correctas. Si perdemos esa capacidad de reflexión, de crítica y autocrítica, estaremos en manos de los dogmatismos y fundamentalismo ya sean religiosos, políticos o cualquier otro. La filosofía es más importante de lo que solemos pensar. Debemos enseñar a pensar, no, el que se debe pensar.

Ismael Pérez Fernández.