martes, abril 21, 2009

Ensombrecer la historia.

Leo en El País las últimas declaraciones del cardenal arzobispo de Madrid y presidente de la Conferencia Episcopal Española, Antonio María Rouco Varela, que como era de esperar ,son jugosas. La primera de ellas:

"el crimen del aborto ensombrece la historia de la humanidad"

Lastima que a los dirigentes de la Iglesia Católica no les haya preocupado nunca eso de ensombrecer la historia de la humanidad, de haberles preocupado antes, tal vez, nos habríamos ahorrado unas cuantas guerras santas. Lo lamentable es que no hace falta irse tan atrás en el tiempo. Por ejemplo, aquí tienen las declaraciones del obispo Axamovic, de Djakoro, durante el conflicto de los Balcanes él cual prometía a los serbios que “cuando os hayáis convertido a la fe católica, se os dejará en paz en vuestras casa”. O ya en pleno siglo XXI hemos tenido que escuchar al actual Papa decir autenticas barbaridades sobre los preservativos, lo cual teniendo en cuenta la situación de África en lo que al SIDA se refiere, como poco se puede tildar de irresponsable. Mucho me temo que son declaraciones que ensombrecen la historia de la humanidad. Otra afirmación del señor Rouco:

"se quiere reducir la democracia al mecanismo empírico"

No queda muy claro que quiere decir con esta frase, lo evidente es que las leyes que se aprueban en democracia tienen que ver con la realidad física, esto es, con hechos empíricos. Por ejemplo, si se saca una ley sobre la violencia de genero se hace en base al hecho empírico de que dicha violencia existe. ¿Que encierra esta frase del cardenal? Qué quiere ¿que se legisle sobre lo divino? Que cada cual adore al Dios que quiera. Lo que no es de recibo es que haya que convertir en leyes las creencias religiosas de unos cuantos.

Por último el señor Rouco ha hecho una reflexión sobre la asignatura de Educación para la Ciudadanía y los Derechos Humanos, defendiendo el derecho inalienable de los padres a educar a sus hijos en los principios morales y religiosos que libremente asuman y cultivan. Este tema es más peliagudo, en cuanto a la asignatura en concreto ésta ya paso por los tribunales y tenemos veredicto, así que, en ese punto no merece la pena marear la perdiz. Pero eso de un derecho inalienable de los padres para elegir la moral de sus hijos, no sé, da que pensar ¿por qué debemos asumir que lo que elijan los padres es la mejor opción? ¿Y si los padres quieren que su hijo sea un terrorista islámico? ¿O si lo quieren educar en la supremacía del hombre sobre la mujer? ¿Deberíamos dejar que esos padres educaran así a sus hijos?

Ismael Pérez Fernández.

3 comentarios:

  1. Anónimo12:00 p. m.

    Me ha gustado el titulo del Blog Homínimos.

    Pero tengo 2 preguntas ¿cuando empieza la vida de un homo sapiens?
    y ¿en que casos un homo sapiens puede quitar la vida a otro homo sapiens?

    Un saludo de un homo sapiens (coincido contigo en que sapiens sapiens está por ver)

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  2. Comienzo por la segunda, por poder, puede quitar la vida cuando quiera, suponiendo que disponga de los medios necesarios para hacerlo, la pregunta interesante éticamente hablando es ¿cuando es moralmente aceptable matar a otro homo sapiens?

    En cuanto a la primera, no sé si está mal formulada, pero la verdad es que así planteada no me parece que tenga mucho sentido. Da la impresión tal y como está formulada la pregunta que existe una especie de sustancia “la vida” que en un momento determinado aparece en el homo sapiens. Lo cual no tiene mucho sentido.

    Un saludo.

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  3. > ¿cuando empieza la vida de un homo sapiens?
    En efecto, falta que expliques un poco mejor qué quieres decir. A falta de eso diría que el "homo sapiens" como especie es una secuencia de estados, todos ellos vivos: el espermatozoide y el óvulo son células vivas, el embrión es un organismo vivo, el niño, el adulto, están vivos. No hay un estado "muerto" en ningún momento del proceso.

    >¿en que casos un homo sapiens puede quitar la vida a otro homo sapiens?
    No hay una respuesta unánime ni indiscutible ya que la moralidad es algo cambiante de acuerdo con la percepción de cada sociedad en cada momento. Casi todos estaríamos de acuerdo en un caso de defensa propia o de la familia (pero no todos). En las guerras se suele asumir que matar al contrario no es un hecho moralmente rechazable ya que hay un motivo mayor que lo justifica. Mucha gente defiende que la pena de muerte es aceptable en casos diversos.
    Saludos

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