domingo, octubre 10, 2010

La reflexión del domingo

La ética religiosa se basa en una sanción de recompensas y castigos póstumos. Convierte la bondad en el decreto de un ser sobrenatural. Uno hace el bien, a la luz de su religión, para alcanzar la dicha eterna. Si efectivamente existen poderes naturales en el Universo, sería prudente hacer lo que estos piden, para bien o para mal, si lo que uno quiere es salvar el pellejo; pero aunque lo que pidan es hacer el bien, esta motivación no es una motivación moral, sino una motivación egoísta e interesada. Si veo a dos hombres haciendo el bien, uno porque quiere evitar el castigo de un supuesto agente sobrenatural y otro porque respeta a su prójimo, este último me parece infinitamente más honorable.
~A.C.Grayling~

3 comentarios:

  1. enderwig11:45 a. m.

    coincido contigo.

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  2. Yo tengo claro que la ética va mas allá de las religiones, cualquiera, todas son y han sido funestas para la humanidad. La importancia de la ética en nuestro ser personas es lo fundamental, respeto a los otros,respeto a uno mismo e aquí lo fundamental.

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  3. Anónimo8:19 p. m.

    Hola, soy Víctor.
    Espero que publiquen esto.
    El señor Grayling está equivocado en lo que al cristianismo se refiere.
    En la religión cristiana el objetivo de las buenas obras no es para alcanzar la vida eterna, eso no depende de cuan bueno seas en esta tierra, si no Dios sería sobornable. La caricatura que mucha gente conoce del cristianismo les dice que para ir al cielo tienen que ser buenos, pero eso es falso, para ir al cielo sólo tienes que ser malo; pero un malo que se arrepiente del mal cometido. Si alguien se cree bueno por sí mismo y por lo que hace, entonces no irá al cielo, Jesús dijo que había venido a buscar a pecadores, no a justos.

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